Saturday, August 20, 2005

CUENTO DE PIEL Y FUEGO

Presiento estar perdida
en este cuento de piel
y fuego
presa en la provocación
de un verso
murmurado a flor de labios
soñado sin derrotas
rojo, alucinado
prendido como la muerte
en las hogueras del te quiero.
No te deshagas en la ausencia,
humo y angustias.
El viento de tu sangre
enredado en los cuernos de la luna
vuelve a bajar su resplandor callado
hasta nuestras manos de sed
cuando amanece.

JENIFFER MOORE

Tuesday, August 16, 2005

Poesía para soñar

Cierra los ojos y viaja conmigo
invisible
sin rozar el suelo
por un cielo ancho y claro
bajo los acordes inefables de este piano
que desgrana para ti
su melodía.
Que resbale por tu piel
la blanca espuma de sus notas
música que abraza tus oídos
y cae inexorable
por tu cuerpo que vuela.
Porque eso somos
sobre este terrón de sacrificios:
un par de alas
surcando el cielo, en compañía.
Una soledad de a pocos, que volamos
en los rumbos del poema
casi escrito
en la lengua y en el miedo.
Y hasta que llegue
la hora de las estrellas
déjate llevar, idea y carne
en la danza sublime del que sueña.

JENIFFER MOORE

Thursday, August 11, 2005

Agosto

Es agosto otra vez y ya me abrasa
con su manto de espinas y de estrellas
nada ha cambiado aún, pero es distinto
la luna en cien pedazos resucita.
Es agosto otra vez, como era entonces
en la edad del castillo y de la arena
de la burbuja anclada en esos ojos
plagados de hastío, maltrechos de sombras.
Es Agosto, no temas, casi siempre
trae desiertos todos sus balcones
no habrá una multitud sobre sus calles
ni el cobarde que aplaude.
Es agosto y descalza me avecino
sobre el humo displicente que se hilvana
como un bordado nuclear insomne
en la ciudad abandonada.
El se va a ir, verás, siempre lo hace
llevando en sus bolsillos rotos
una llave de amor que no me entrega.

JENIFFER MOORE

De fantasías

Tengo un botellón de fantasías
brillando solitario en esta mesa,
sólo una gota pequeña he derramado
sobre lengua de silencio.
Me asombro de mis propias manos,
de la lenta catarata que me inunda
arrastrando versos como patos
que nadan sin prisa a las orillas.
Se ha ensanchado el cauce a costa mía
huesos y piel, uñas y dientes
mordiéndose en la rima
(como si al alma le importara el lente).
Tengo un botellón de fantasías
ansioso de papel, ebrio de tinta
y un faro que titila intermitente
para que encuentres pronto ese camino.

JENIFFER MOORE

NO ES UNO

Me preguntaron sobre la escalada del comunismo en América Latina y especialmente
en los escenarios de mi Argentina. Yo les dije:


Que se enfríe la tinta, que se enfríe
que vuelva a sus caudales tanto río
revuelto de sombras.
Que se aplaque la sangre, que se aplaque
en el retorno de la mirada clara
que no miente.
No es uno, son miles, son millones
los cuervos que desean
nuestros ojos.
Será el pan nuestro, sin Dios ni alas
pagado con el alma
entre sus rejas.
Que no empiecen a escribirnos sus historias,
que la paz de nuestros niños
no nos deje.
No es uno, son miles, son millones
la horda que llevo por mis venas
sin paciencia.

JENIFFER MOORE