Y la Palabra llueve
de pie, junto a tus besos, con la boca perdida
en una caricia larga, en hondo desespero
me tocas y te toco,
tus hombros son el muro que escalo agazapada
lengua de cien noches que al trópico revuelve.
Tu risa, mis suspiros, estación de los mares
y la espuma que abrasa dos orillas sedientas,
de pie, junto a esa dulce melodía en tus labios
susurrando mieles, desanudando males.
Me llamas, te llamo
la voz tiembla en el pecho desnudo del abrazo
de pie, soy escultura de isla sojuzgada
descúbreme en el beso tu boca de milagro.
Simplemente me amas,
simplemente te amo.
JENIFFER MOORE